Fecha: 18-05-2012. Fuente: Terra.org
“Nosotros debemos elegir. ¿Vamos a obedecer las leyes del mercado y de las insaciables empresas o a las de Gaia para mantener los ecosistemas de la Tierra y la biodiversidad de sus habitantes?
Las necesidades de agua y comida de las poblaciones tan solo se pueden satisfacer si se protegen los medios que nos ofrece la Naturaleza. Las tierras muertas y los ríos contaminados no pueden dar ni alimento ni agua.
Defender los derechos de esta Tierra-Madre es por tanto la lucha más importante por los derechos del ser humano y la justicia social. Se trata del mayor movimiento por la paz de nuestros tiempos”.
Con este alegato, Vandana Shiva pone punto y final al trabajo del reportaje de su etapa vital entre 1973 y 2010 escrito por el periodista Lionel Astruc publicado por La Fertilidad de la Tierra en castellano con el título Vandana Shiva. Las victorias de una india contra el expolio de la biodiversidad.
Vandana Shiva es sin duda una de las personas más relevantes en la lucha contra la epidemia de biopiratería y defensora de que la agricultura tradicional y ecológica no puede ser sometida a la patente de semillas por parte de las corporaciones transnacionales. En las últimas décadas, la producción, procesamiento y distribución de alimentos están siendo arrebatados de las manos de mujeres.
En 1998, la organización de Vandana Shiva, Navdanya inició una campaña contra la biopiratería del arroz Basmati que quería apropiarse la corporación norteamericana RiceTec. Los tribunales dieron la razón a Navdanya con una sentencia que negaba que RiceTec hubiera ‘inventado’ variedades de semillas y plantas de arroz, incluyendo la altura de plantas, la longitud de los granos, el aroma, cuyas características se encuentran en las variedades tradicionales del arroz Basmati indio. Luego tuvieron que luchar contra el intento de apropiación por parte de Montsanto de la variedad de trigo indio Nap Hal.
Las grandes corporaciones de alimentación pretenden con las patentes de vida que la agricultura tradicional no pueda recoger sus semillas para plantar las plantas nutritivas de las que se alimentan. Vandana Shiva ha sido una de las principales abanderadas en la lucha contra las patentes de vida y el expolio de la biodiversidad en las plantas agrícolas.
Vandana Shiva recibió en 1993 el premio Nobel alternativo de la Paz. La vida de esta excepcional mujer que recorre el mundo demostrando con su trabajo diario como defender la libertad de usar las propias semillas por los agricultores es todo un ejemplo. El libro Vandana Shiva. Las victorias de una india contra el expolio de la biodiversidad es la recopilación de su trabajo entre 1953 y 2010 dividido en cinco etapas.
Uno de las características de esta excepcional mujer es que en su primera etapa estudió física nuclear y a comienzos de los años 1970 estuvo empleada en la Comisión de la energía Atómica India. Sin embargo, la influencia de su familia, su padre era un guarda forestal y su madre estuvo ligada al movimiento de las mujeres Chipko que defendían la corta de los árboles de los Himalaya abrazándose a los mismos. Aunque el cambio, la revelación se la facilitó su hermana Mira al demostrarle los horrores de la radioactividad. Como afirma ella misma “mi compromiso con el movimiento Chipko y el comienzo de mis estudios sobre la teoría cuántica en Canadá, marcaron un nuevo comienzo… y antes que pudiera darme cuenta la ecología había tomado el primer puesto en mi vida”.
El libro Vandana Shiva. Las victorias de una india contra el expolio de la biodiversidad narra las cinco etapas de su vida, la cual ha girado esencialmente contra la lucha de las patentes de vida. Sus éxitos legales contra la biopiratería tienen otra cara y es como las semillas transgénicas arruinan a los pequeños agricultores por lo que en los últimos años se han suicidado más de 25.000.
El libro, profusamente ilustrado con imágenes inéditas de la vida de Vandana Shiva y de su trabajo social también narra la lucha de la comunidad del pueblo de Plachimada (en el distrito índio de Palakkad, al norte de Kerala) contra una fábrica de Coca-Cola que arruinó el suministro del acceso al agua para la población local. La lucha titánica de la población de Plachimada contó con la colaboración de Vandana Shiva. En 2008 organizó la “Marcha de las semillas” en la que los peregrinos que participaron atravesaron 7 estados, recorrieron 4000 km y pasaron por 200 pueblos en los que distribuyeron más de 4.200 kg de semillas de 32 variedades diferentes a más de 50.000 granjeros. Su principal arma es la pedagogía. Por eso nos advierte que “en el acto de comer, estamos ya participando en la producción. Comiendo productos orgánicos decimos «no» a los tóxicos y apoyamos a los agricultores orgánicos. Rechazando los organismos genéticamente modificados, estamos votando a favor de los pequeños agricultores y por el derecho de las personas a la información y la salud. Comiendo productos locales estamos arrebatando el poder y los beneficios a la agroindustria global y estamos fortaleciendo nuestra comunidad alimenticia local”.
La editorial La Fertilidad de la Tierra ha editado a todo color este excepcional libro que contiene cerca de un centenar de imágenes que describen la vida, la obra y el entorno del trabajo de Vandana Shiva. El periodista francés Lionel Astruc ha escrito una obra que pone de relieve el coraje y el compromiso de esta mujer fuera de lo común. Probablemente, uno podría conocer a Vandana Shiva leyendo su extensa obra (mucha de ella publicada en castellano), pero este reportaje vital ilustrado nos acerca al lado más humano de esta premio nobel alternativo. Al final del libro se detalla de forma no exhaustiva la obra publicada tanto en lengua castellana como inglesa.